Lamentablemente la violencia forma parte del deporte. En muchas ocasiones la competición, la competitividad, nos lleva a ser violentos en la práctica deportiva. Pero si nos paramos a pensar un minuto, es el fútbol, fundamentalmente, el deporte que más la genera.
Sin lugar a dudas es algo contra lo que tenemos que luchar padres, entrenadores, maestros, monitores, ... y que debemos inculcar claramente a todos los pequeños deportistas desde bien pronto. Es un valor fundamental para el deporte y para las relaciones diarias entre personas.
La clave, para nosotros, está clara. ¿Para qué jugamos?¿Para qué competimos? Si consiguiéramos que nuestros peques (y no tan peques) fuesen capaces de entender esto tendríamos mucho ganado.
El juego y el deporte, a cualquier edad, deben tener como objetivo...
...divertirse
...conocer gente
...superarse
...conseguir retos, metas, objetivos, ...
...mejorar nuestra condición física y salud
...transmitir valores
...¿se te ocurren algunos más?
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